domingo, 12 de abril de 2009

Jueves Santo

Por la mañana del Jueves, Pedro y Juan se adelantan para preparar la cena en Jerusalén.

A la tarde llegaron al Cenáculo.

Allí Jesús lavó los pies uno a uno, luego, sentados a la mesa celebra la primera Misa, les da a comer su Cuerpo y su Sangre y les ordena sacerdotes a los Apóstoles, para que, en adelante, ellos celebren la Misa.

Judas salió del Cenáculo antes, para entregarlo.

Jesús se despidió de su Madre y se fue al huerto de los Olivos.

Allí sudó sangre, viendo lo que le esperaba.

Los discípulos se durmieron.

Llegó Judas con todos los de la sinagoga y le da un beso.

Entonces, lo tomaron preso y todos los Apóstoles huyeron.

Lo llevan al Palacio de Caifás, el Sumo Sacerdote.

Lo interrogan durante toda la noche.

Jesús no duerme nada.


Hazle tú hoy compañía al Señor, que está solo.Haz el propósito de no abandonarlo nunca, y de visitarlo con frecuencia en el sagrario.Tratemos de hacer un poco de recogimiento y oración.