¿QUE HIZO HOY JESÚS?
Jesús ha dormido en el pueblo Betania, en la casa de Lázaro, Marta y María, sus mejores amigos.
A media mañana sube andando a Jerusalém que está a unos cuatro kilómetros.
En el camino, como es la hora de comer tiene hambre.
Se acerca a una frondosa higuera llena de hojas, pero en la que no hay higos, entonces la secó, por no tener frutos.
Al llegar a Jerusalén, va al templo y lo encuentra lleno de comerciantes haciendo negocios, y los echa a latigazos, pidiéndoles que tratemos con respeto a Dios y a las cosas de Dios.
Por la tarde pasa por el Monte de los Olivos, donde estuvo haciendo un rato de oración y vuelve a pie a Betania.
A lo mejor Dios tampoco encuentra en ti los frutos que Él esperaba.
Pídele perdón.
¿Tratas con respeto a Dios y a sus cosas?
¿Cómo te comportas en Misa, en el Oratorio o en la Iglesia?
¿Haces con cariño las genuflexiones?
Cuando oyes blasfemas, ¿pides perdón a Dios interiormente?
Fíjate como Jesús dedicaba todos los días a hacer un rato de oración como tú ahora.
No lo dejes ningún día, aunque sea unos pocos minutos.
Señor, al comenzar la Semana en que conmemoramos tu muerte, llena de Luz nuestros corazones para que podamos entender cuánto sufriste por Amor a la humanidad.
Jesús ha dormido en el pueblo Betania, en la casa de Lázaro, Marta y María, sus mejores amigos.
A media mañana sube andando a Jerusalém que está a unos cuatro kilómetros.
En el camino, como es la hora de comer tiene hambre.
Se acerca a una frondosa higuera llena de hojas, pero en la que no hay higos, entonces la secó, por no tener frutos.
Al llegar a Jerusalén, va al templo y lo encuentra lleno de comerciantes haciendo negocios, y los echa a latigazos, pidiéndoles que tratemos con respeto a Dios y a las cosas de Dios.
Por la tarde pasa por el Monte de los Olivos, donde estuvo haciendo un rato de oración y vuelve a pie a Betania.
A lo mejor Dios tampoco encuentra en ti los frutos que Él esperaba.
Pídele perdón.
¿Tratas con respeto a Dios y a sus cosas?
¿Cómo te comportas en Misa, en el Oratorio o en la Iglesia?
¿Haces con cariño las genuflexiones?
Cuando oyes blasfemas, ¿pides perdón a Dios interiormente?
Fíjate como Jesús dedicaba todos los días a hacer un rato de oración como tú ahora.
No lo dejes ningún día, aunque sea unos pocos minutos.
Señor, al comenzar la Semana en que conmemoramos tu muerte, llena de Luz nuestros corazones para que podamos entender cuánto sufriste por Amor a la humanidad.
Con inmenso Amor
