domingo, 12 de abril de 2009

Viernes Santo

VIERNES SANTO

Hoy muere.
Al amanecer del viernes, le juzgan.
Tiene sueño, frío, le han dado golpes.
Deciden condenarlo y lo llevan a Pilatos.
Judas, arrepentido, no supo volver con la Virgen y pedir perdón, y se ahorcó.
Los judíos prefirieron a Barrabás.
Pilatos se lava las manos y manda crucificar a Jesús.
Antes, ordenó que lo azotaran.
La Virgen está delante mientras le abren la piel a pedazos con el látigo.
Después, le colocan una corona de espinas y se burlan de Él.
Jesús recorre Jerusalén con la Cruz.
Al subir al Calvado se encuentra con su Madre.
Simón le ayuda a llevar la Cruz.
Alrededor de las doce del mediodía, lo crucificaron.
Nos dio a su Madre como Madre nuestra y hacia las tres se murió y entregó el espíritu al Padre.
Para certificar la muerte, lo traspasaron con una lanza.
Por la noche, entre José de Arimatea y Nicodemo lo desclavan, y dejan el Cuerpo en manos de su Madre.
Son cerca de las siete cuando lo entierran en el sepulcro.
¡Dame, Señor dolor de amor!